Las personas que consiguen sus objetivos, principalmente se destacan por la virtud de materializar sus ideas, sus proyectos y su propósito.

Podemos elegir que los cambios sucedan solo en nuestra mente o que pasen a formar parte de nuestro mundo exterior e influyan en las personas que nos rodean.

Por ejemplo: Aprender es muy importante, pero si te distrae de aplicar lo que sabes, dejará de tener valor para todos. El lado bueno del miedo es la prevención, el extremo es la parálisis.

Siempre, detrás de todo objetivo, hay una emoción. Veamos esta vez cómo podemos gestionar el miedo.

Date permiso para explorar nuevos escenarios, para exponerte y para descubrir cosas de ti.

Veamos las 5 claves que utilizo en las sesiones de coaching

1: Causa

¿Cuál es la amenaza?

Busca en tu interior, permítete conectar con esa causa que hace que salte tu alarma emocional.

2: Origen

¿De dónde te viene tu miedo a…?

Intenta detectar en qué momento has construido tu cableado interior de acuerdo a este miedo.

3: Reacción

¿Cómo te hace reaccionar?

Toma consciencia de cómo afecta a tu comportamiento, como reaccionas contigo y con los demás.

4: Transformación

¿En qué te gustaría transformar el miedo?

No se trata de eliminarlo, sino transformarlo para que te sirva de impulso.

5: Acción

¿Que te vas a permitir?

¿Cuándo?

Para que haya un cambio real, no solo tienes que trabajar tu mente y tu emociones, con tu paso a la acción pones a prueba tu compromiso para superar tus propios limites y crear nuevos patrones de comportamiento.

Mírate después de la acción… 

¿A quién ves?

Supongamos que dices que quieres convertirlo en valentía…

Para que esto tenga sentido, piensa en cuanto te ayudará esa valentía para avanzar hacia tu objetivo y en que necesitas soltar para poder dar ese paso.

Por último visualiza tu hoja de ruta, incluyendo la prevención inicial del miedo, el cambio de acciones para transformarlo en valentía y tu gestión interna para permitirte soltar los bloqueos que te impiden avanzar.

Realiza los ajustes necesarios hasta que lo veas realista y asumible, cuando lo tengas solo  tienes que dar el primer paso y en la acción lograrás el cambio.

En las sesiones de coaching, utilizo el método CORTA

C: Causa

O: Origen

R: Reacción

T: Transformación

A: Acción

Con esta metodología ayudo a las personas a reestructurar su cableado de creencias limitantes, como ves, los cambios nacen en el interior y se manifiestan en el exterior.

Los errores y que los miedos forman parte del camino, es cuestión de gestionar las emociones que nos provoca.